• El ministro Manuel Castells ha acudido esta mañana a la Universidad Autónoma de Barcelona para visitar uno de los ejemplos actuales en sostenibilidad ecológica en el sistema universitario español
• Manuel Castells: “Los campus universitarios no tienen que ser solo un espacio de reflexión e investigación. La experiencia de vivir ecológicamente va a ser tan importante como las demás enseñanzas que puedan recibir”

El ministro de universidades, Manuel Castells, ha acudido esta mañana a la Universidad Autónoma de Barcelona en el contexto de la charla Campus universitarios: laboratorios para las ciudades sostenibles. En el mismo han participado también el rector de la UAB, Javier Lafuente; el Secretario General de Agenda Urbana del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, David Lucas Ferro; el Director de la Unidad Técnica de Arquitectura de la Universidad de Valladolid, Francisco Valbuena; la Directora General de Green Building España, Raquel Huerta; el Director del ICTA de la UAB, Xavier Gabarrel y la Vicerrectora de Campus, Sostenibilidad y Territorio de la UAB, Carme Miralles.

El ICTA-UAB y su sede sostenible

El ministro, Manuel Castells, ha podido visitar las instalaciones de el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (ICTA-UAB), que ha acogido el acto. Un centro multidisciplinar que promueve la investigación y la formación de posgrado en ciencias ambientales. Un instituto diseñado y desarrollado bajo la finalidad de mejorar la comprensión sobre el cambio ambiental global así como de la naturaleza y de las causas de los problemas ambientales. Además, este instituto estudia las políticas, estrategias y tecnologías que fomentarán la transición hacia una economía sostenible y que han sido analizadas en la visita como fuente y ejemplo de buenas prácticas.

Desde octubre del 2014, el ICTA-UAB se encuentra en un emblemático edificio situado en el campus de la UAB que satisface los estándares de alta eficiencia energética.

Desafíos ante la emergencia climática

Uno de los principales retos que abordan las sociedades modernas, y que la pandemia ha puesto también de manifiesto, es el cuidado del medio ambiente y de nuestros entornos. La transición energética hacía un modelo más sostenible en los próximos años es un desafío que reclama una acción conjunta de toda la sociedad y de las instituciones. Así, las universidades, como lugares de generación y transferencia del conocimiento, se constituyen como polos de creación y tienen un papel clave en la investigación e innovación sobre tecnologías de eficiencia energética al tiempo que funcionan como laboratorios en avances en sostenibilidad.

Acciones que miran al futuro

Bajo este enfoque, el Ministerio de Universidades está trabajando con el objetivo de avanzar hacia la creación y desarrollo de prototipos de gestión ecológica sostenible de los campus universitarios. Así lo ha puesto de manifiesto el ministro Manuel Castells, que ha afirmado que “Los campus universitarios no tienen que ser solo un espacio de reflexión e investigación. La experiencia de vivir ecológicamente va a ser tan importante como las demás enseñanzas que puedan recibir”.

En coordinación con el Ministerio de Transición Ecológica, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MTMAU), el Ministerio de Universidades está impulsando y dando seguimiento para que las universidades públicas soliciten proyectos dirigidos a la mejora de la eficiencia energética de los edificios en los campus a través de sus respectivas Comunidades Autónomas. Esta partida económica- incluida en los PGE- está dentro del Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (PIREP) que se encuentra dentro del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia. “Las sociedades están cambiando, las ciudades son los centros y ante estas situaciones hay que plantear nuevas soluciones, nuevos retos y nuevas propuestas que permitan mejorar la calidad de vida de los ciudadanos” ha afirmado David Lucas.

El Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia es la oportunidad para construir un futuro común con un proyecto de país fuerte, y que sepa aprovechar el impulso para impulsar procesos de innovación y digitalización, pero sobre todo para reconstruirse sobre unas coordenadas de sostenibilidad. Este proyecto se enmarca dentro de los fondos NextGenerationEU, un instrumento temporal de recuperación dotado con 750 000 millones de euros que contribuirá a reparar los daños económicos y sociales inmediatos causados por la pandemia de coronavirus.