- A lo largo de 2022, el Ministerio de Universidades ha realizado un diagnóstico sobre la segregación en los estudios universitarios, entrevistando a expertas en la materia.
- En torno a sus resultados, el ministerio lanza la campaña “Dale la vuelta”, para tratar de sensibilizar a la población universitaria de esta realidad.
- De cara a 2024, Subirats anuncia la creación de un grupo de trabajo interministerial cuyo objetivo sea revertir las cifras actuales de segregación, “impropias del siglo XXI”.
El ministro de Universidades, Joan Subirats; junto con Amaya Mendikoetxea, rectora de la UAM y responsable de CRUE Igualdad; y María Ángeles Sallé, experta en segregación en los estudios; han presentado esta mañana, 27 de marzo, la campaña “Dale la vuelta” de sensibilización para la reducción de los estereotipos de género en los estudios universitarios.
En el último año desde el Ministerio de Universidades se ha trabajado en la identificación de la segregación por razón de género en los estudios universitarios. La labor de diagnóstico inicial se ha realizado a través de un estudio cualitativo consistente en entrevistas en profundidad a expertas del ámbito universitario en la materia.
Datos de segregación en el ámbito universitario
El objetivo del ministerio con estas iniciativas es revertir los datos de segregación entre hombres y mujeres en estudios y profesiones. Los datos más recientes que tenemos sobre segregación (año académico 2020/2021) nos muestran una realidad muy segregada por género en los estudios. Así, en los estudios de enfermería las mujeres representan el 82% del estudiantado de grado en las universidades españolas. Siendo este el caso más extremo, también hay casos como los estudios de psicología, en los que las chicas estudiantes representan el 76%; o los estudios relacionados con la salud y servicios sociales, con un 72%. También a modo de ejemplo, en los estudios de medicina el 69% de las matriculadas son mujeres. Otro caso especialmente relevante son los estudios relacionados con la educación en el que el 64% del estudiantado son mujeres, dato especialmente agravado en términos de segregación en Educación Infantil, en la que suben hasta el 92%.
Por otra parte, se observan casos de ámbitos de estudio en los que los hombres representan una mayoría muy amplia. Este es el caso de informática, con un 86% de estudiantes chicos matriculados, siendo el caso de segregación más extrema. También hay otros, como las Ingenierías, en los que representan el 74% de los matriculados; o los estudios de Matemáticas y Estadística, en los que suponen el 64%. También cabe señalar Humanidades, con un 62% de los estudiantes matriculados.
El ministro Subirats ha recalcado durante su intervención que la investigación muestra que “la falta de mujeres en algunas disciplinas y la falta de hombres en otras disciplinas (en especial las ciencias de la salud y las educativas) requiere tener una mirada sistémica, intervenir desde edades muy tempranas para trabajar los modelos que influyen en la infancia, tratar de mejorar los programas didácticos para no participar del silenciamiento de muchas autoras e investigadoras, fomentar el pensamiento híbrido en todo el itinerario educativo (es decir, acercar unas disciplinas a otras, de manera que se puedan mezclar lógicas); y medir el impacto y evaluar la eficacia de las acciones que se van desarrollando”.
Amaya Mendikoetxea, responsable de CRUE Igualdad, ha recalcado que “es preocupante que cada vez haya menos estudiantes a las llamadas disciplinas del futuro. Necesitamos más vocaciones STEAM en general, pero ponemos el foco en las mujeres porque simplemente incorporando a más mujeres al estudio de estas disciplinas contribuiríamos de forma muy significativa a cerrar esta brecha. No es una cuestión de números, sino de una cuestión de perspectiva de género para desarrollar una ciencia y una tecnología que sea más diversa, más inclusiva y sin sesgos por género”.
Durante la presentación del estudio cualitativo, la doctora María Ángeles Sallé, experta en la materia, ha señalado la necesidad de “romper estas relaciones que generan desigualdades. La segregación no se entiende sin la desigualdad. Estas desigualdades están muy insertadas en la manera dicotómica de cómo interpretamos y actuamos en el mundo.Y la realidad es que la vida no funciona así, es algo arraigado en nuestra cultura y muchas veces no nos damos cuenta. No solo nos plantea un problema de desperdicio de talento o de justicia social, también es un riesgo sistémico. Necesitamos una comunidad universitaria orientada a la igualdad que dé ejemplo a todos los niveles”.
Objetivos y próximos pasos
En el diagnóstico inicial llevado a cabo por el Ministerio de Universidades, se constata y afirma con claridad por parte de todas las expertas entrevistadas que en esta distribución por género de la población estudiantil influyen factores de tipo sociocultural y psicosocial, que tienen que ver con cómo los procesos de socialización y de construcción cultural de las identidades a edades muy tempranas atribuyen roles en función del género.
Pero hay más factores en juego, como aquellos vinculados a la cultura de la ciencia: existen claras marcas de género en algunos campos de conocimiento y estudios como el de ingeniería informática, muy masculinizadas; o en el campo sociosanitario, muy feminizado.
Además, el ministro Subirats ha explicado que “el objetivo común que tenemos el ministerio y las universidades es que nuestros jóvenes elijan sus estudios con un mayor grado de libertad y que garanticemos que todos y todas van a estar formadas con las herramientas esenciales para convivir en la sociedad actual y para construir la sociedad del futuro de manera conjunta. Para ello, y para conseguir este objetivo, seguiremos trabajando con los ministerios de Ciencia e Innovación, Educación y Formación Profesional e Igualdad”.
Finalmente, el Ministerio de Universidades ha presentado la campaña “Dale la vuelta” con la que pretende sensibilizar a la población universitaria de esta realidad y empezar a revertir esta segregación con algunos modelos importantes, con especial atención a un público joven. El ministro anunció también la creación de un grupo de trabajo interministerial que pueda trabajar sobre esta temática en los próximos años, con objetivos conjuntos y aunando las iniciativas que ya se están llevando a cabo.